Alguien muerde un basta
desmembrado
que le salpica el cuerpo.
En el silencio
cómplice
el mundo es un funeral a cuenta.
Será muy tarde entonces.
Impune oscuridad
de piedra eterna.
La humanidad arrasada
por una epidemia de yonosabía.
De: Canto a un prisionero. Edit. Poetas antiimperialistas de America. Otawa, 2005.
martedì 8 luglio 2008
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